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Fabricantes y distribuidores exigen juntos el Plan Renove de vivienda

16.02.2015 10:53

El presidente de los fabricantes de recubrimientos cerámicos, Isidro Zarzoso, y el presidente de la Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción y Equipaniento de Vivienda (Andimac), Antonio Ballester, alzaron en Cevisama la voz para denunciar que el plan de apoyo a la reforma y la rehabilitación de viviendas impulsado por el Ministerio de Fomento es “insuficiente”, y exigieron que se ponga en marcha un auténtico Plan Renove, con “ayudas directas a las viviendas individualmente”, y no solo para la mejora de los espacios colectivos (fachadas, escaleras...) como ahora ocurre. De lo contrario, serán “pocos los frutos” que se podrán obtener y, por tanto, difícilmente el sector azulejero castellonense remontará sus datos.

La queja la hicieron formalmente en el acto de apertura de la jornada que Cevisama, Ascer y Andimac celebraron en el transcurso de la feria para dar a conocer las ayudas que desde la Administración se han puesto en marcha, y que ascienden a “unos 481 millones de euros”, según los datos aportados por la arquitecta Engracia Arias, que hizo la ponencia inaugural.

“Necesitamos un Plan Renove, que contemple ayudas directas a la vivienda, al estilo del que puso en marcha la Comunidad Foral de Navarra en el año 2008, que tuvo mucho éxito, o las que ha activado ahora el Ayuntamiento de Onda”, subrayó Isidro Zarzoso, dos modelos que elogió y que pidió al Gobierno central y autonómicos que apliquen: “Hay que focalizar el esfuerzo en la rehabilitación, porque esto hay que entenderlo como una inversión y no como un gasto”.

En este sentido, y pese a agradecer que, “tras años de trabajo, finalmente se haya puesto en marcha” un programa de incentivos por parte del Ministerio, insistió en que “nuestra opinión es que las líneas de apoyo deberían ser más extensivas”, concretamente apoyar “las viviendas individuales, porque si no, no podremos recoger todos los frutos; esperamos que se haga extensivo”, zanjó.

Según Engracia Arias, hay un mercado potencial de 1,2 millones de viviendas en España susceptibles de beneficiarse de las ayudas, al estar construidas antes de 1981. Sin embargo, los incentivos solo están contemplados si actúan en la propiedad colectiva, y siempre enfocado a aspectos como la eficiencia energética o la accesibilidad. El presidente de Andimac, Antonio Ballester, se sumó a la reivindicación de Ascer, contraponiendo el modelo empleado en el sector de la construcción con el del plan PIVE de la automoción, y que está situando el ritmo de matriculaciones a niveles previos a la crisis, con 17 meses encadenados de subidas.

“El Ministerio está haciendo muy poco por la rehabilitación y la reforma”, lamentó Ballester, quien también apeló a la colaboración entre industria fabricante de baldosas cerámicas y distribuidores para ganar notoriedad en el mercado, sobre todo en ámbitos como “la eficiencia energética”, donde el azulejo cuenta con soluciones como la fachada ventilada.