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Frenazo a la tasa de residuos del azulejo de Castellón

28.12.2017 12:38

La nueva tasa de residuos, que comenzará a aplicarse el 1 de julio, como informó Mediterráneo, apenas gravará al sector azulejero, que cifró en un millón y medio la afección. Este es el objetivo del Consell y para el cual mantendrá varias reuniones con la patronal Ascer, la primera, el próximo día 9. ¿Cómo se materializará esto? Aunque todavía no está definido, ya hay previstas bonificaciones o exenciones «de hasta el 90%» del gravamen, informó ayer el president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig. Y es que la industria cerámica ya aprovecha y reutiliza (el objetivo último de la nueva norma) la mayoría de sus residuos, señala el secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro.

Estas son las principales conclusiones de la reunión de ayer entre los responsables de la patronal azulejera Ascer, encabezados por su presidente, Isidro Zarzoso, con respresentantes del Consell. Junto a Puig y Álvaro estuvieron el conseller de Hacienda, Vicent Soler, y el director del Institut Valencià de Finances, Manuel Illueca. Además de la «aplicación progresiva» de la tasa y de las bonificaciones (que saldrían de la propia tasa a otros sectores, como las cementeras, que incineran gran parte de sus residuos e incluso reciben de otras zonas), se va a abrir «un proceso de diálogo» con el sector para avanzar en otras materias, dijo Puig.

La aplicación de la norma, que emana de una directiva a nivel europeo, no se puede evitar y busca, además, «acabar con el turismo de residuos»: la llegada a la Comunitat Valenciana de basura de otras zonas del Estado.

MEDIO AMBIENTE, EN LA MESA

Desde la patronal, Zarzoso no pareció ayer preocupado por la aplicación del nuevo impuesto --«no es de alta consideración, pero nos afecta», dijo tras escuchar las explicaciones del Consell--, aunque prefiere esperar a ver «cómo queda» finalmente el asunto tras las reuniones que mantendrán con los responsables políticos, en las que participará la Dirección General de Medio Ambiente, que se suma a la Mesa de la Cerámica.

Sobre el aumento de los fondos del plan de rehabilitación de vivienda (Renhata) a 5,5 millones y la solicitud al Gobierno de que aporte «lo mismo», que expresó Puig, Zarzoso apuntó: «Más que aumentar el presupuesto, lo que quisiéramos es que la Generalitat intentara divulgar esto en otras comunidades para que se subieran al carro porque es positivo para todos los españoles».

Con el incremento de las aportaciones al plan Renhata (que pasa de 3 a 5,5 millones para el 2018, en su segundo año de vigencia), el jefe del Consell señaló que tratarán de incluir en el próximo ejercicio a aquellos solicitantes que se quedaron fuera de la primera convocatoria.

AYUDA A LA EXPORTACIÓN

En las próximas reuniones de la Mesa de la Cerámica también se va a analizar «de qué manera se puede asegurar la exportación», algo que, por ejemplo, sí se lleva a cabo en Italia, lo que provoca una desigualdad de oportunidades con el principal competidor de la industria castellonense. «No tenemos competencia directa, pero estamos dispuestos a hablar con el Gobierno para habilitar mecanismos y aportar fondos», apuntó ayer el president de la Generalitat. Se buscará de esta manera mejorar la «competitividad», dijo, «de una industria que es un pulmón de vida para Castellón» y la Comunitat, concluyó Puig.