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El Tile of Spain aspira a un sobresaliente en Cersaie 2017

20.09.2017 10:43

El termómetro anual de Cersaie ya está aquí. El principal evento promocional para el Tile of Spain, que comenzará el lunes en Bolonia, debe suponer un impulso clave para que las firmas expositoras cierren un ejercicio económico que, en líneas generales, está siendo bastante prolífico para las azulejeras.

Las ventas en el exterior mantienen su línea al alza con un crecimiento de más del 5%, y el consumo en España también mejora, incluso por encima el 15%. En este escenario favorable, aunque no exento de incertidumbres, el azulejo español espera poner la guinda al año con una edición de Cersaie que se prevé con récord de asistentes y, ojalá, de pedidos.

En el salón estarán presentes cerca de 170 empresas españolas. Junto a las azulejeras hay que sumar las esmalteras, las firmas de equipamiento para el baño, perfilería, displays y soluciones constructivas. Será, como mandan los cánones, la principal potencia extranjera en el recinto comercial de BolognaFiere.

Durante esta edición de Cersaie, el Tile of Spain pondrá el foco de atención en todos los aspectos vinculados con la innovación y la sostenibilidad. El protagonismo lo acapararán los grandes formatos, el desarrollo de la industria 4.0 y, sobre todo, la búsqueda de nuevos espacios y aplicaciones del material.

Paralelamente a estas apuestas, también se darán a conocer innovadoras soluciones, fruto de la I+D+i, como parte fundamental de los avances tanto en lo que concierne a recubrimientos como el diseño de un Tile of Spain, que gana espacios en singularidad y competitividad especialmente en los mercados europeos y estadounidenses, como así atestiguan los registros que se vienen dando durante el último año.

COMPETENCIA ITALIANA
Las compañías españolas, según manda la tradición en las últimas décadas, volverán a pugnar en Cersaie 2017, principalmente con las marcas italianas. De todas las firmas en el certamen, más del 81% del total serán o transalpinas o españolas. Por tanto, la cita será, de nuevo, un mano a mano entre ambos países para obtener el mayor número de pedidos en los pabellones de Bolonia.

Los restantes países productores de cerámica dentro del contexto internacional asumirán, por obligación, un rol menor en Cersaie, especialmente los países emergentes, a los que el evento limita su presencia, por ahora, por una cuestión de espacio comercial.

China apenas tendrá representación e, incluso, pierde una empresa con respecto a 2016 y solo tendrá ocho firmas en el evento. Egipto gana una y llega a cinco; Emiratos Árabes mantiene sus tres; India duplica su delegación con seis; y Brasil solo contará con dos. Por su parte, Vietnam, Indonesia (una potencia mundial en cuanto a cifras de producción total), Túnez, Irán o Malasia apenas desplegarán una compañía.

Finalmente, tres países europeos ocupan los puestos tercero, cuarto y quinto en cuanto a firmas en el evento. Se trata de Turquía, que mantiene sus 30 enseñas; Alemania, que seguirá contando con 22; y Portugal, que alcanza 21 con la suma de cuatro nuevas compañías. En cualquier caso, todos ellos muy por detrás de Italia y España, que mantienen este año con holgura su superioridad numérica.

Este equilibrio de fuerzas entre firmas italianas, españolas y del resto del mundo podría verse alterado en las siguientes ediciones con la ampliación del recinto de Bolonia. El incremento de superficie comercial en 35.000 metros cuadrados permitirá el acceso de más compañías a la cita y, por tanto, generará una competencia adicional que sumar a la habitual durante los últimos años.

¿Y CHINA?
Uno de los asuntos que estará muy presentes en Cersaie será la decisión, aplazada a octubre, que adoptará la Comisión Europea sobre las medidas antidumping con respecto a los productos procedentes de China. El Tile of Spain confía en que la UE renueve las medidas correctoras y no poner en riesgo el azulejo español.