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“Si la tendencia no cambia, el 2016 terminará algo mejor que el pasado”

26.09.2016 09:41

--El año 2015 fue de estancamiento para la industria de fritas, esmaltes y colores cerámicos. ¿Por qué?
-Entendemos que no es achacable a un solo factor. Por un lado, la problemática mundial, así como los vaivenes de la economía china e internacional, afectaron a todos los mercados. Por otro, si bien la cifra de exportaciones se mantuvo, según los datos del Icex hubo un crecimiento en toneladas exportadas del 4%, lo que implica que, en volumen sí se creció, pero los precios de algunos productos se estancaron o incluso redujeron por la competencia e incremento de la producción local de fritas, esmaltes y colores cerámicos en zonas con industria azulejera.

--¿Cómo está siendo la marcha de este 2016?
-Los datos son de un leve crecimiento, sobre todo debido al tirón del mercado nacional. Los últimos datos del Icex indican lo que sería un mantenimiento en la exportación (-0,6%) hasta julio, y en cuanto a nacional, según parece el mercado en el primer semestre ha subido un 7%, lo que daría un crecimiento global del 1,7%.

--¿El mercado nacional es el nuevo motor para el sector?
-Tras la fuerte crisis del sector español de fabricantes de cerámica que culminó en el 2011, está creciendo. Ello nos lleva a aumentar nuestras ventas en el mercado nacional, que es el que más se había ralentizado. El mercado internacional crece de forma más estable.

--¿Qué países son los que tiran?
-Siguen tirando los mercados tradicionales, como Italia, China, Argelia, India o Marruecos, por este orden, si bien hay que destacar la caída de China en casi un 12% con respecto al primer semestre del año pasado, junto a las de Egipto (-26%), Rusia (-17%), Arabia Saudí (-19%) o Brasil (-22%). Han subido sin embargo Argelia (22%), Emiratos (9%), Italia (7%), India (2%), Alemania (6%) y Portugal (5%).

--¿Cuáles son las perspectivas para finalizar el año? ¿El 2016 será también de impás?
-Si la tendencia no cambia, pensamos que en general será un año algo mejor que el anterior. Este año el mercado nacional está creciendo a buen ritmo y la exportación de momento se mantiene en euros y crece en toneladas, por lo que de momento el balance arroja un resultado positivo. En cuanto a las incertidumbres geográficas, está claro que hay países con importantes y diversos problemas. Afortunadamente otros mercados están al alza y esto equilibra.

--China sigue desinflándose. ¿Es una tendencia consolidada?
-La bajada de China nos afecta porque ha bajado a la 2ª posición en el ránking de destinos. A ello han contribuido la crisis económica china, que comenzó el año pasado, y el aumento de la producción local. China es un país poco innovador pero que copia rápidamente, por lo que cualquier novedad introducida tarda poco en ser fabricada por los productores locales. Eso sí, difícilmente consiguen la calidad, producto y servicio de las empresas españolas.

--La gran asignatura pendiente del sector azulejero es mejorar los precios de venta. ¿Es un problema de estrategia comercial o de la tipología de producto?
--Creemos que hay una mezcla de todo. Hay que desarrollar y mejorar mucho la estrategia comercial, vendiendo el producto español dentro del segmento de gama alta, con calidad, buen servicio y a precio competitivo. Es conocido por todos que los italianos nos llevan ventaja en ello, pues desde hace mucho tiempo han apostado por la defensa del producto, es algo que forma parte de la idiosincrasia del país, independientemente de lo que vendan.
En cuanto a nuestros fabricados, aportamos al cliente lo que nos demanda. Hay quienes se decantan por la innovación y otros por el precio. Podemos servir cualquier tipo de producto, pero nuestra industria apuesta por la innovación y el valor añadido como elemento diferencial. La idea es que esta diferencia, que nos ha hecho líderes mundiales, pueda ser una referencia no solo del esmalte español, sino también del azulejo.

--¿Cómo les afecta a las empresas de ANFFECC la política ‘low-cost’?
-Nos afecta porque entre nosotros ya hay mucha competencia, no solo en el mercado nacional, sino en el mercado global. También dentro del sector hay empresas que se han especializado más en innovar, y otras continúan fabricando productos de menor valor añadido, pero si el azulejero quiere vender low-cost, difícilmente vamos a poder introducir innovación, pues tiene su coste.

--¿Cuáles son los principales retos del sector a medio plazo?
--A corto plazo, mantenernos con este crecimiento sostenido e intentar, en lo posible, mejorar las cifras del año anterior. A medio plazo, continuar apostando por la I+D+i, que ha hecho de nuestro sector un referente mundial. La tecnología inkjet y los nuevos formatos han abierto el campo para un sinfín de posibilidades en el azulejo, tanto estéticas como técnicas. Debemos continuar en esa línea y crear tendencia y nuevas áreas de desarrollo para este material, que sin duda continúa teniendo potencial.

--¿Qué expectativas tienen respecto a que la UE no alce los controles y aranceles a los productos azulejeros ‘Made in China’?
--Es una amenaza no solo para el azulejo, sino para todo tipo de productos. Los aranceles nos pueden beneficiar pero, en un mundo global, solo se puede competir realmente con una innovación y una producción que respete el medioambiente, que sea sostenible en costes y que posibilite precios competitivos con productos de mayor valor añadido.

--¿Cómo valora la situación política nacional? ¿Cómo les afecta?
-Afecta a todos porque no deja de crear un clima de inestabilidad y es difícil prever la política industrial, de empleo... No obstante, las empresas no podemos parar, por lo que continuamos trabajando y desarrollándonos, que es lo que tenemos que hacer, al margen de quién gobierne.

--¿Qué se espera de esta edición de Cersaie y Tecnargilla?
-Cersaie es la feria cerámica más importante a nivel mundial y las empresas apuestan por presentar sus mejores productos y de la mejor forma posible. Tecnargilla ha dejado de ser tan relevante para nuestro sector, si bien hay firmas que exponen en ambas. Siempre es un escaparate para exponer novedades, tener contacto directo con el cliente y ver tendencias.