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El ‘tasazo’ de Soria aboca al cierre de 80 cogeneradoras en el azulejo

10.02.2014 08:42

La cogeneración está condenada a “desaparecer” y, con ella, una de las fuentes de competitividad de la industria cerámica en Castellón. Fuentes del sector destacan que la propuesta de Orden Ministerial que el ministro de Industria, José Manuel Soria, ha trasladado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para que las empresas puedan plantear sus alegaciones a lo largo de este mes de febrero, “aboca al cierre masivo de plantas” de cogeneración, ya que conllevará un “desproporcionado recorte de ingresos”, con la eliminación de las primas que ahora recibían en concepto de eficiencia energética.

En la provincia de Castellón, y vinculadas al sector cerámico, existen 80 plantas de cogeneración, que generan 300 megawatios de electricidad, muchas de ellas de más de 15 años. La cogeneración es un sistema que está incorporado en el proceso de producción de la industria y que permite aprovechar el calor generado durante la fabricación de baldosas o las arcillas para reincorporarlo al proceso, generando al mismo tiempo electricidad, que se utiliza en la instalación o se vierte a la red general. A cambio, el Gobierno establecía una serie de primas en concepto de eficiencia energética, al tratarse de un sistema que fomentaba el ahorro en el consumo de las energías convencionales.

Sin embargo, la reforma que el Ministerio de Industria tramita supone la eliminación de esas primas, con lo que, sumadas a las medidas anteriores, el sector estima un aumento de la factura de “62 millones de euros”, según los cálculos de la patronal Ascer.

Fuentes del sector han explicado que la cogeneración, en el 2013, recibió en concepto de primas en España un total de “1.960 millones de euros”. Ahora, Industria “pretende reducir en unos 1.800 millones de euros las primas al abolido Régimen Especial, de los que el sector de la cogeneración soportaría 750 millones”, lo que, sumado a las primas que dejarán de recibir, “la cifra podría se superior a los 1.200 millones de euros, es decir, el grueso de la reducción recaería en la cogeneración”.

De este modo, y de cerrarse las plantas de cogeneración, las empresas tendrán que soportar un mayor coste de la energía que utilizan, de manera que perderán competitividad, en opinión de la patronal Acogen, que aglutina a todas las empresas españolas con estos sistemas de energía.

El sector también denuncia que la norma que tramita el Gobierno contempla 806 modelos de plantas, cuando en España hay 985 instalaciones de cogeneración, una cantidad de parámetros que hacen la ley “muy compleja” y difícil de definir.