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Los sindicatos UGT y CCOO han anunciado movilizaciones, entre las que no se descarta la huelga, si la patronal del sector azulejero, Ascer, no da un giro "de 180 grados" en su propuesta en la reunión que mantendrán ambas partes la próxima semana dentro de las negociaciones del convenio colectivo.
Los representantes de los trabajadores han protagonizado este viernes una concentración en la plaza María Agustina de Castelló para informar sobre la situación de las negociaciones, y se han desplazado hasta la plaza Mayor.
El representante de CCOO, Jordi Riera, ha destacado a los medios de comunicación, tras celebrarse nueve reuniones con la patronal, la situación de "inmovilismo" por parte de Ascer, "dado que prácticamente solo han movido una mísera propuesta salarial con incrementos para 2021 de 0,5 por ciento y de un punto para 2022 y 2023, cuando el IPC en el mes de mayo está disparado al 2,7%".
"Son planteamientos económicos los que han puesto encima de la mesa totalmente inaceptables y, además, se niegan a regular lo que entendemos que es la clave para modernizar el convenio, que sería una regulación de turnos acorde a la realidad que hay en el sector", ha añadido.
Asimismo, Riera ha explicado que la patronal no entiende que se deban mejorar los conflictos que se generan en el sector, como el tema del empleo. "Entendemos que lo que hay que hacer es mejorar las condiciones de trabajo y reducir las jornadas anuales para seducir a los trabajadores nuevos que tienen que incorporarse al sector industrial", ha dicho.
Por su parte, el representante de UGT, Vicente Chiva, ha anunciado que, si no hay "movimientos" por parte de la patronal en la próxima reunión, los sindicatos presentarán un conflicto colectivo para poder hacer presión con distintas acciones, entre las que no descartan la huelga, "ya que es el elemento más fuerte que tenemos que habrá que utilizarlo cuando haga falta".
Chiva ha explicado que la patronal argumenta las subidas de luz o de gas para no acceder a las peticiones de los sindicatos, "como si los trabajadores no tuvieran subidas de luz o de gas".
El representante de UGT ha significado que para reconducir la situación en la próxima reunión la patronal debe dar un giro de 180 grados "porque no puede ser que intenten quitar la antigüedad, absorber y compensar los salarios cuando el sector ahora está en incremento de trabajadores e, incluso, tiene dificultades para encontrar trabajadores". "Si quieren tener un convenio ridículo y espantoso, pues seguramente aún encontrarán menos trabajadores", ha añadido.
Según ha manifestado, el sector está haciendo todos los esfuerzos por mejorar su posicionamiento internacional y las cifras de exportación así lo confirman, "pero no se puede ignorar la grave afectación de las cuentas de resultados por el incremento de los costes energéticos, tanto del gas como de la electricidad, y con ellos el de las materias primas, el imparable encarecimiento del mercado de emisiones de CO2, o la amenaza del nuevo Fondo de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico".
"Los costes laborales son otro factor muy importante y cualquier incremento de los mismos debe venir acompañado de mejoras de la productividad, o no será posible", ha añadido.
Ascer considera que las organizaciones sindicales tienen "todo el derecho" a expresarse a través de concentraciones y manifestaciones, pero ha advertido que "mientras no se acepte que la negociación colectiva es un proceso en el que ambas partes deben obtener satisfacción a, al menos, una parte de sus reivindicaciones, el acuerdo no será posible".