Grupo bricks impulsa una nueva etapa para Koiné, su marca exclusiva de cerámica y baño, con un posicionamiento renovado «que mira al consumidor final». Tras consolidarse como una firma de referencia dentro del canal profesional, Koiné evoluciona «hacia una marca con identidad propia, una imagen visual diferenciada y una estrategia digital pensada para inspirar al cliente final y, al mismo tiempo, reforzar la propuesta de valor de los asociados del grupo».
Este lanzamiento viene acompañado de una nueva identidad visual, una web propia y presencia activa en redes sociales. El objetivo es claro potenciar la notoriedad de la marca en el punto de venta y ofrecer al consumidor una experiencia completa que lo acerque de forma natural a los almacenes de Grupo Ibricks.
«Con este movimiento buscamos facilitar al asociado una marca con identidad, con herramientas de comunicación profesionales y con un respaldo visual que le permita competir con garantías. Koiné es una herramienta que refuerza el posicionamiento de nuestros almacenes en un mercado cada vez más visual y exigente», indica Javi Damià, gerente de Operaciones de Grupo Ibricks.
Desde la compañía señalan que «hoy, más del 90% de los asociados de Grupo Ibricks ya confían en Koiné como parte clave de su estrategia comercial». Con más de 1.400 referencias activas en exposición, «elegidas por su equilibrio entre diseño, rotación y margen», Koiné da ahora un nuevo paso.«La implantación de Koiné y su posicionamiento como marca son cada vez más sólidos. Sus resultados a corto plazo son muy positivos y su proyección a largo plazo es exponencial. Estamos ante una firma que aúna diseño de tendencia con primeras calidades, y a un precio muy competitivo. Ese equilibrio es nuestro gran diferencial», resalta Sergio Moya, jefe de Producto de Grupo bricks.
Desde la firma apuntan que Koiné es una herramienta transversal: presente en catálogos, promociones, campañas gráficas y showrooms, y ahora también en el mundo digital, «donde conectará con el consumidor de forma directa». Todo ello, «sin alterar la esencia de su modelo: venta exclusiva a través de los almacenes asociados de Grupo Ibricks».
El planteamiento de la empresa parte de que «Koiné no es una marca teórica. Es el resultado de años de trabajo junto a los asociados, escuchando sus necesidades y observando cómo evoluciona la decisión de compra en el punto de venta. Esa cercanía al terreno le ha permitido crecer con solidez, adaptarse al consumidor y convertirse en una herramienta comercial plenamente eficaz, que inspira y diferencia sin perder la esencia profesional que la vio nacer».
En esta nueva etapa, además, la marca empieza a incorporar conceptos como la neuroarquitectura, poniendo el foco en cómo los espacios, los materiales o la luz pueden influir en la experiencia del usuario y su bienestar, reforzando así el vínculo entre diseño y emoción.
«Trabajar con Koiné nos da confianza. Sabemos que es un producto exclusivo, bien elegido y con una imagen cuidada, que encaja perfectamente con lo que buscan nuestros clientes. Además, tener el respaldo de la Central nos permite ser más competitivos sin perder nuestra identidad como almacén», manifiesta Aurelio Palacios, gerente de Onda Castellón, asociado de Grupo bricks.
En definitiva, con esta nueva etapa, Grupo bricks reafirma su compromiso con «un modelo que respeta la identidad del distribuidor y le da herramientas reales para competir con más fuerza». Asimismo relatan desde la firma con sede en Valencia que «Koiné no sustituye, acompaña. No impone, construye. Y, sobre todo, conecta: con el profesional, con el punto de venta y, desde ahora, también con el cliente final».