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El azulejo de Castellón crece más que el italiano en el 2014

21.01.2015 09:43

Las empresas azulejeras de Castellón han cerrado el ejercicio 2014 con una evolución muy superior a la de su más directo competidor, Italia, que está viviendo en sus carnes un estancamiento de los resultados por la ralentización de sus exportaciones a mercados prioritarios y la caída de la demanda interna. Una prueba más de que las fábricas de Castellón están haciendo mejor los deberes y se están adaptando mejor a la coyuntura de cada momento.

Según los datos facilitados por la patronal azulejera italiana Confindustria Ceramica, el clúster transalpino cerró el pasado ejercicio 2014 con una previsión de alza de ventas del 0,8%, una cifra que contrasta con la tasa del 3,16% lograda en diciembre del 2013, y también con la de “entre el 2 y el 3%” de las españolas, según la estadística avanzada por la española Ascer. En este sentido, Confindustria Ceramica no ha facilitado cifras reales de ventas, pero teniendo en cuenta que el año 2013 se cerró con una facturación de unos 4.730 millones de euros, significa que el alza final ha podido rondar los 4.767 millones de euros, un avance muy tímido que refleja las dificultades por las que atraviesa el sector que hoy ostenta el liderazgo mundial en la comercialización de baldosas cerámicas. El dato de Italia contrasta con el de España, que ha rozado los 2.850 millones de euros (+3%), lo que demuestra la mejor evolución de la estrategia comercial del Tile of Spain. Si la cifra de ventas en Italia es mayor o es consecuencia de que el precio medio del m2 producido en España es casi 7 euros más barato.

Por otro lado, la producción del clúster azulejero italiano ha crecido un 4,5%, si bien se limita a unos 380 millones de metros cuadrados. En el caso de España, los hornos apenas registrarán un alza con respecto al 2013 --en el último cuatrimestre ha caído la producción y se cerrará en negativo--, pero a día de hoy se calcula que las firmas de Castellón fabrican 420 millones de metros cuadrados anuales, lo que las sitúan como el primer productor europeo de baldosas.

Detrás del estancamiento del balance de las empresas italianas hay dos factores: la ralentización de las exportaciones, que apenas suben un 3%, por la caída de envíos a Rusia y la congelación de pedidos en EEUU, y por otro lado, por la caída de la demanda interna en Italia, que se hunde otro 6,9%, en una crisis sin precedentes para el sector. En el caso de las azulejeras de Castellón, han sumado 5 años de caídas consecutivas desde el 2008, si bien Ascer ha asegurado que el pasado 2014 se cerró, por primera vez, con un nivel de pedidos estabilizado, hablando incluso de “un crecimiento del 4%, si bien no compensará el freno en el exterior”.

Para este 2015, los italianos prevén un aumento de las ventas del 2,2%, una previsión que Ascer no se ha atrevido a anticipar, limitándose a afirmar que el primer semestre será “difícil”.