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Font de Mora: "Hay que seguir apostando por el valor añadido"

23.09.2019 11:18

En su segundo año al frente de la patronal de fritas, esmaltes y colores cerámicos (Anffecc), Joaquín Font de Mora afronta una coyuntura difícil debido al descenso de las ventas en un primer semestre que define como «desalentador», pero que quiere revertir con el impulso de la feria italiana de Cersaie.

--En apenas dos años Anffecc ha renovado sus dos caras más visibles, el presidente y el secretario general. ¿Cómo afronta la asociación este relevo? ¿Qué cree que aportará Manuel Breva, nombrado secretario general?

--Ha sido una transición natural. Manuel Breva lleva más de 20 años en Anffecc trabajando mano a mano con José Luis Breva y conoce de primera mano todos los temas, tanto técnicos como institucionales. Además, es una persona preparada y con un gran conocimiento del sector. La asociación quiere crecer y creo que este relevo generacional ayudará mucho.

--¿Con qué nivel de ventas llega el sector a una de las citas más importantes del año, como es Cersaie? ¿Cuál es el objetivo para el último trimestre?

--Las ventas llevan una espiral descendente. Las cifras del primer semestre han sido un tanto desalentadoras, con una caída del 7,3%. Esperamos que Cersaie suponga un empujón para remontar en el último trimestre.

--Esa caída de ventas, ¿se debe al mercado nacional o al exterior?

--El mercado nacional ha caído más que el exterior, pero la tendencia es generalizada. Italia, que después de España es nuestro principal destino, ha registrado una caída del 27% en el primer semestre del año. India ha descendido un 9% y Turquía otro 36%. Las cifras no son halagüeñas y la coyuntura económica internacional nos afecta, pues jugamos en un mercado global. En cambio, hay algunos mercados en los que nos va mejor, como Argelia, Marruecos o Francia.

--Uno de los caballos de batalla en los que el sector ha tenido un papel activo es el de la reducción de los peajes del gas. ¿Se dan por satisfechos con la primera propuesta de Competencia?

--De momento el tema está aún en borradores. Desde la asociación GasIndustrial (que reúne a la industria intensiva en el uso de gas) se han presentado alegaciones a la propuesta de Competencia porque hay margen de mejora. En España pagamos por los peajes del gas un 45% más que la media europea. Es la principal fuente de energía en el sector y supone más del 40% de nuestros costes energéticos. No estaremos satisfechos hasta lograr precios y peajes mas competitivos.

--El precio de las materias primas es también fundamental para el sector. ¿Cómo han evolucionado los costes de aprovisionamiento de materiales como el zirconio, el praseodimio, el cobalto o el óxido de zinc?

--El precio de las materias primas todavía no ha recuperado los precios de referencia del 2016. Actualmente tanto el circonio como el óxido de cinc son un 62% y un 31% más caros que hace tres años. El cobalto sigue siendo una montaña rusa: sube, baja, sube... En suma, las materias primas que cotizan en bolsa están sometidas a una mayor volatilidad.

--¿Cómo afectan al sector de fritas y esmaltes procesos políticos como el ‘brexit’ o la guerra comercial Estados Unidos-China?

--Cuestiones como el brexit, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la desaceleración de Alemania.. todo influye en un momento en el que se habla de una posible recesión y en el que las empresas tienen que seguir apostando por los productos de mayor valor añadido. Recordemos que las tintas para impresión digital fueron una revolución en plena crisis, por lo que mantener la inversión en investigación es fundamental si queremos mantener el liderazgo a pesar de las circunstancias.

--¿Qué representa para la asociación que el sector forme parte de la lista de fuga de carbono de la UE para el periodo 2021-2030?

--Ha sido uno de los principales logros de la asociación en el último año. Anffecc ha trabajado mucho en este tema y estar en la lista supone contar nuevamente con derechos de emisión gratuitos, que nos permitan seguir produciendo sin penalizar a nuestras empresas. El riesgo de deslocalización existe, nuestras empresas están muy internacionalizadas y costaría poco empezar a producir fuera, pero en el sector siempre se ha apostado por mantener la producción y la investigación en España, pues las sinergias que se crean en el clúster cerámico castellonense promueven enormemente el desarrollo y la investigación. Por otro lado, el sector lleva mucho tiempo mejorando sus ratios de emisión y su eficiencia energética, para evitar la contaminación, por lo que pagar por los derechos sería un gasto añadido.