Desconectar
ES ACTUALIDAD
Industria

Estudian nuevas arcillas para la cerámica

El centro de innovación de FP de la Generalitat valenciana coordina el proyecto, que involucra a 50 personas

14.04.2023 09:35

El sector cerámico de Castellón es uno de los más afectados por la guerra en Ucrania, un conflicto que estalló hace más de un año y que no se sabe cuándo acabará.

La economía global se ha visto perjudicada en mayor o menor medida por este asunto, pero en el caso del azulejo se suma la necesidad de encontrar materias primas con las que fabricar sus productos. Hasta marzo del pasado año, Ucrania era el principal suministrador de arcilla blanca, por lo que desde el mismo momento en el que quedó interrumpida la importación de este material, son varias las líneas de investigación abiertas para hallar alternativas.

Una de ellas tiene como escenario el instituto de Secundaria El Caminàs de Castelló, que imparte los ciclos medio y superior de cerámica en el CRN (Centro de Referencia Nacional de fabricación cerámica) de Labora en Castellón.

La profesora del departamento de cerámica y coordinadora del proyecto, Beatriz Adell, explica que en el presente curso «hemos iniciado un proyecto, llamado Comceral, que cuenta con la coordinación del Centro de Innovación Digital Avanzado para la Formación Profesional (CIDA) de la Generalitat», y que tendrá continuidad el curso que viene.

Complemento a otras investigaciones

La iniciativa, detalla Adell, «pretende ser un complemento a los estudios que realizan los técnicos de las principales empresas y el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC), con el fin de ser una ayuda para las empresas».

Además del propio ITC con sus laboratorios, cuentan con la ayuda de la empresa Arcillas Atomizadas, del Grupo Pamesa, que proporciona muestras de arcillas para analizar sus características. La fase final será en Onda, donde se realizarán piezas acabadas con las formulaciones que surjan de la investigación.

Implicación

Comceral tiene la catalogación de proyecto de innovación avanzada de formación profesional, y cuenta con la implicación de medio centenar de alumnos. No todos ellos son de los ciclos de cerámica. También contribuyen estudiantes de la familia de química del IES Vicent Castell i Domènech de Castelló, con el análisis de las arcillas. «Las de Ucrania tenían unas características de plasticidad, fundencia y blancura que las de otros puntos carecen, y de ahí que se siga formulando», expone la profesora, con el fin de que el producto final tenga la calidad esperada.

Otras contribuciones son las del departamento de informática, que prepara un software específico para que las formulaciones se puedan poner a punto en la fábrica; y del departamento de logística y transporte, que analiza los costes de traer las materias primas hasta PortCastelló. A todo ello se suma la colaboración del IES Serra d’Espadà de Onda, que cuenta con ciclos de desarrollo y fabricación cerámica medio y superior, y donde se realizarán las piezas acabadas.

A todo ello se suma la colaboración del IES Serra d’Espadà de Onda, que cuenta con un grado de fabricación de productos cerámicos, y donde se realizarán las piezas acabadas. «Englobamos desde la llegada de las materias primas al puerto de Castellón hasta su cocción», menciona Beatriz Adell, con aspectos como los costes de los productos sustitutos. También realizan actividades en el centro Labora, que es un espacio de referencia dentro del sector. .

Los alumnos del IES El Caminàs, que cuenta con la calificación de instituto de excelencia, tienen con el proyecto de arcillas la oportunidad de dedicar una parte de su formación a un caso real y práctico, y del máximo interés para el conjunto del sector.

Oportunidad laboral

La actividad en la que está embarcado este instituto se complementa con otros alicientes para los alumnos, como el hecho de que es uno de los centros formativos que ofrece FP Dual, de manera que una parte de las horas lectivas se realizan en forma de trabajo real en empresas. «Los grados que tenemos cuentan con una empleabilidad total», ya que una gran parte de los alumnos que realizan estas prácticas acaban siendo contratados por las empresas del sector. Una oferta que complementa la formación de la UJI en grados universitarios, y que está dirigida a la industria que más gente emplea de la provincia.